Este mes de febrero "P" cumple 18 meses. Parece que la rapidez con la que crece es directamente proporcional a la velocidad con la que se olvida ... De los primeros dos o tres meses me acuerdo mucho porque tengo muchas fotos y además cada situación nueva te trae un recuerdo de las sensaciones vividas.
Por ejemplo, me acuerdo de los primeros días dándole el pecho y las 25 posturas que probaba una y otra vez para que comiera... O de los paseos por la calle y lo poco que le gustaba el carro.... Yo no quería pasear lejos de mi casa por si la vuelta era llorando a pleno pulmón y se hacía interminable. También me acuerdo de su primer "ajo" y la primer vez que escuche su voz con algún gorgorito.
Sin embargo veo las fotos de los meses siguientes y no me acuerdo de nada ... Veo sus lorcitas y no me acuerdo de que estuviera tan preciosisimo o veo algunas de las fotos y alucino con la paciencia desarrollada para cogerle en esas poses de querubín.
Desde que "P" ha cumplido el año su crecimiento se ha ralentizado y mi ansia de hacerle fotos a todas horas también!!. Eso y el hecho de que desde mi vuelta al trabajo no tengo tiempo de nada....
En su revisión de los 18 meses "P" sigue estando por encima de 90 del percentil en peso y altura, vamos que está hecho un león!! quizás es por eso de haber nacido en agosto y ser leo ;))))
En esta revisión de los 18 meses también lo vacunaron, bueno, en realidad fue a la semana siguiente ya que el día concreto de la revisión "P" tenía malestar y no sabíamos si era catarro que comenzaba a presentar síntomas o era un simple mal día ...
El día que le administraron el recuerdo de las vacunas por los 18 meses tuvimos un pequeño traspiés, ya que aunque parecía que también le iban a poner la segunda dosis de la vacuna de la varicela, al final no se la administraron (desde el mes de febrero por fin la dispensan en las farmacias - la primera dosis nos la trajeron de Andorra y se la pusieron en el mes de noviembre - ). Al parecer, aunque había transcurrido el tiempo prudencial entre una dosis y otra, reconsideraron la edad de "P" y viéndolo demasiado pequeño decidieron esperar hasta que tuviera sus dos años cumplidos para administrar la segunda dosis de la vacuna de la varicela. Yo me quedé más tranquila con la prudencia de la pediatra, aunque la vacuna esperando en el dispensario desde febrero a agosto, no sé qué tal se conservará.
